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11 febrero 2021¿Qué sabemos del té oolong, o té azul?
Está a medio camino entre el té negro y el té verde, sus primos hermanos. Pero al té oolong azul se le conoce como té parcialmente fermentado, si bien otros lo consideran “té posfermentado”, puesto que habría sufrido un proceso de maduración posterior. Aunque no es tan conocido como otras clases de té, va ganando popularidad poco a poco para muchos.
Más allá de saber dónde comprar té oolong (乌龙, en mandarín: pronúnciese Wū lóng), quizás debamos conocer a fondo los beneficios que conlleva tomar este té, cuya suavidad, según los expertos, hace de él una bebida muy agradable.
Té oolong: propiedades
El hecho de que disminuya la grasa corporal y ayude a adelgazar -debido a que mejora el metabolismo de los lípidos- hace de esta bebida una aliada apreciada si se está a dieta. O simplemente, si se quiere evitar la obesidad. Sus efectos diuréticos son muy valiosos, puesto que ayudan a perder líquido. Los aminoácidos afectan, positivamente, al pelo y las uñas.
Pero hay más. Sus poderes antioxidantes, vitaminas y minerales son excelentes para nuestras defensas, y reducen la tensión arterial y el colesterol, previniendo enfermedades como el cáncer. De hecho, nuestros pulmones, en especial si somos fumadores, agradecerán mucho la ingesta de este té.
¿Cómo se debe tomar el té azul… y cuándo?
Un té tiene sus momentos. Si seguimos la tradición oriental -según divulgadores como Miguel R. Heredia-, habría que tomarlo a media mañana, o un poco antes (o una hora después) de las comidas, con el fin de que no afecte al estómago.
En el caso del té oolong, se dice también que lo suyo es tomarlo justo después de comer. ¿Y cómo tomarlo?
- En primer lugar, evitémoslo antes de dormir. Aunque el té azul (entre 10 y 55 mg.) no acumule tanta teína como el té negro (entre 25 y 100 mg.).
- Hay quien prefiere acompañar sus comidas con él. Marida bien con los pescados, también con las aves, el pique y los alimentos salados.
- Tanto el té verde como el oolong están considerados suaves, de modo que se aconseja prepararlos en teteras de porcelana, cerámica o vidrio.
- Coloquemos el té en hebras en un colador -una cucharadita-, y a continuación añadamos el agua hirviendo (a unos 90 o 100º C), dejándolo en reposo, alrededor de tres minutos. Se oxida rápido, de modo que… ¡cuidado con alargar el reposo!
- Un par de tazas al día, cada día, sienta muy bien; si bien lo mejor es no endulzarlo, en caso de que necesitemos algo de azúcar, mejor recurrir a la miel o a la estevia, edulcorante de origen sudamericano.